El lamentable suceso generó la reacción de la Iglesia Católica, que expresó hoy su repudio mediante un comunicado. “Repudiamos con profunda tristeza los lamentables sucesos que se cometieron ayer, 8 de marzo, en frente de la Catedral de Tucumán que agravian profundamente la persona e imagen de la Santísima Virgen María, Madre de Dios, como también la Fe de los católicos tucumanos”, expresó la Arquidiócesis de Tucumán en una misiva firmada por el Arzobispo Alfredo Zecca.
Para la Iglesia, la representación “contradice profundamente una celebración donde se quería dignificar a la mujer, tantas veces humillada, golpeada y asesinada”.
La situación se da en el marco del mes de reflexión sobre los Derechos del Niño por Nacer. En este sentido, Zecca convocó a la comunidad a participar de la marcha por la Vida y la Familia que tendrá lugar el 25 de marzo, a las 18, y que irá de plaza Urquiza hasta la Catedral, para “celebrar juntos la Eucaristía y realizar un acto de desagravia al dulce nombre de María y su hijo, nuestro redentor”.