Este viernes por la noche, el Dr. Pedro José Mozzatti, médico cirujano, falleció de coronavirus. La triste notica emocionó a la comunidad sanitaria ya que Mozzatti venía desempeñándose hace unos 12 años en la Dirección de Emergencias Sanitarias 107. Por razones de salud, (problemas cardiacos) el profesional desde marzo se encontraba prestando sus servicios desde su hogar.
“Queridos amigos, la gran familia de la Dirección de Emergencias Sanitarias- 107 Tucumán , está de luto”.
En la noche de ayer, nos dejó el Dr. Pedro José Mozzatti. Cirujano que se desempeñó como médico de nuestra Dirección desde el año 2008. Amaba su trabajo en la ambulancia, pero por razones de salud, comenzó una tarea administrativa que cumplía con la misma dedicación. Siempre deseó volver a la calle, a la acción, pero su corazón no se lo permitía. En marzo cuando tuvo que tomar licencia obligatoria por la pandemia, pidió seguir trabajando desde su casa, y fue allí donde el maldito coronavirus lo encontró y encontró a su familia.
De él podemos decir muchísimo y la mejor manera es recordarlo con las palabras del Dr Juan Masaguer: "...un tipo honrado, ese legado del cual todo hijo debe enorgullecerse. Laburante, al punto de renegar de ese aislamiento al que debemos someternos todos los que acarreamos algunos achaques, que como él, no queremos abandonar ese puesto de privilegio en la primera línea de esta desigual batalla. Es nuestro primer caído…
Dios quiera que sea el único…de todos los años en que estoy en la dirección, todo lo vivido han sido una sucesión de hechos que nos marcaron para siempre…recuerdo con Pedro uno muy particular, que lo quiero compartir: eran los tiempos en que estaban juzgando a Bussi. Teníamos la responsabilidad de cuidar de su salud, para que pudiera declarar en dicho juicio. Un día gris, después de las audiencias, volví a buscar mi auto en el estacionamiento de la dirección…y mientras yo lloraba de rabia y de dolor (todos conocen mi historia personal), dentro de mi auto, se estacionó una ambulancia al lado…de ella bajó envuelto en llanto Pedro…salí, lo abracé y me contó entre sollozos que una criatura de pocos años había fallecido entre sus manos y que no la había podido rescatar...enjugar mis lágrimas, para contener la de ese compañero, que sólo repetía que dicha niña le recordaba a su propia hija, fue lo que me dio la certeza, de quien era ese Pedro…fue quizás la vez que entendí que a la Dirección era mucho más que un edificio, mucho más que ambulancias, radios, etc...la Dirección era muchos Pedro…mucho amor por cada desconocido que socorríamos en las calles…que era el ejercicio de la solidaridad disfrazada de medicina...
Pedro era en ese momento, la razón por lo que representa la institución y que con seres humanos como él, todo iba a estar bien, que siempre aunque soportamos algunos tropiezos, íbamos por el camino correcto. Nunca me sentí más honrado con el cargo de director, como ese día…abrazando a un compañero que le dolía como propio, el dolor de una familia que no tendría una hija para abrazar...grande Pedro...hoy me dicen que te adelantaste en la partida de estos terrenales sitios...que allá vas, vuela alto, amigo, compañero, que nosotros tendremos por tarea preparar el encuentro...qué más decir, solo pedir al Todopoderoso que de éstos que tanto queremos que no se vaya ni uno más…descansa en paz, amigo, hermano, sos un luchador, no perdiste porque cada rincón estará siempre vestido de tu presencia y tu sonrisa...de tu permanente bonhomía…y si somos humanos, me tomo la libertad de seguir lagrimeando...hasta todos los momentos..."