El dirigente de la Federación de Obreros de la Industria Azucarera (FEIA), Juan Correa, logró que la Superintendencia de Servicios de Salud de la Nación lo reconozca como administrador de la Obra Social del Personal de la Industria Azucarera (OSPIA), el 26 de abril pasado. Y apenas 24 horas de haber tomado posesión en el cargo, entregó el manejo de la institución a su abogado, el especialista en temas sindicales Marcelo Urban, "un personaje poco querido en el sector sindical, por su vinculación con los ex ministros Jorge Triaca y Dante Sica, provenientes del macrismo", lo reconocen quienes lo cruzaron alguna vez.
El abogado de Correa fue el interventor elegido por el ministro de Trabajo de Macri (Dante Sica) para “normalizar” el SUPA (Sindicato Unidos Portuarios Argentinos, aunque también fue quien llevó a cabo la intervención de UTEDYC y el SOMU cuando desplazaron a Omar “El Caballo” Suárez, de quien también fue su asesor y apoderado.
El viernes pasado, Urban hizo su aparición pública en la sede de la OSPIA y no lo hizo solo, llegó de la mano de una contadora (María Belen Bau) que trajo de su estudio en Buenos Aires y la puso al frente de la Tesorería, para controlar la millonaria caja que dejó el administrador anterior, José Leguizamón.
Justamente Leguizamón que se repone de una larga internación de tres meses afectado por Covid-19, estuvo a cargo de la gestión de la obra social de los empleados de la industria azucarera desde el año 2012, cuando fue puesto en funciones por la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Leguizamón que también ocupa una banca como concejal en Bella Vista por el peronismo, afirmó que deja una obra social "totalmente saneada, con depósitos por 400 millones de pesos; más de 60 mil afiliados y con el pago al día de todos los prestadores médicos".
Además, indicó que en estos últimos años bajo la supervisión de la Superintendencia de Salud, compró dos inmuebles (en calle Las Heras al 300 y en General Paz al 100); con lo que se capitalizó aún más a la institución para beneficio de todos los afiliados.
Recordó que cuando se hizo cargo de la OSPIA apenas tenía 700 afiliados y deudas millonarias que le impedían brindar los mínimos servicios sociales.
Pero a partir de la asunción de Correa, cuestionado por su falta de representación sindical, Leguizamón teme que "la obra social no pueda seguir creciendo como lo hizo en los últimos años hasta convertirse en la mejor obra social sindical del país y se convierta en un botín de guerra para algunos personajes nefastos como Correa y Urban".
Relaciones aceitadas
Quienes lo conocen, ven en el abogado Marcelo Urban una gran capacidad de negociar y traccionar las causas sindicales, gracias a las aceitadas relaciones que tiene tanto en los tribunales laborales como en las áreas del Poder Ejecutivo. Esto quedó en evidencia durante la administración de Mauricio Macri.
Mientras el poderoso sindicalista kirchnerista Omar "Caballo" Suárez, cayó en desgracia por decisión del macrismo y terminó preso por tres años, acusado de asociación ilícita y vaciamiento del SOMU, Urban salió indemne. A pesar de haber actuado en esos años como asesor y apoderado de Suárez.
La suerte del abogado gracias al macrismo fue aún mayor porque tiempo después por decisión de Dante Sica, terminó actuando como interventor de un gremio de los portuarios.
Así lo reflejaron algunos medios de prensa: "el Ministerio de Producción y Trabajo, que conduce Dante Sica, intervino un sindicato portuario de Santa Fe y Corrientes y designó a un ex hombre del polémico Omar "Caballo" Suárez, uno de los sindicalistas presos durante el macrismo. Se trata del Sindicato Unidos Portuarios Argentinos (SUPA) de Puerto General San Martín, Bella Vista, Timbúes y Puerto Gaboto, liderado actualmente por Jorge Vargas tras la detención en agosto pasado de Herme "Vino Caliente" Juárez, histórico dirigente del sector".
"Lo que llamó la atención en el mundo sindical es que el Ministerio de Producción designó como interventor al abogado Marcelo Esteban Urban, que durante años fue el apoderado legal del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) durante la gestión del ahora detenido "Caballo" Suárez. En abril de 2016, en el marco de la causa que investigaba una presunta defraudación al SOMU, el juez federal Rodolfo Canicoba Corral había ordenado la separación total y el desapoderamiento del abogado Urban. Además, el magistrado también lo había instado a que entregara todos los poderes originales que tuviese".
Precisamente esa causa judicial "derivó en la intervención del SOMU por las innumerables irregularidades de la gestión de Suárez, por lo que sorprende ahora que Sica designe en otro gremio del sector a un abogado (Marcelo Urban) vinculado a esa gestión".
Pero también medios porteños apuntan a que Urban está vinculado al histórico gastronómico Luis Barrionuevo, que operó para que el letrado se haga cargo de varias intervenciones a sindicatos.
Aunque los más memoriosos recuerdan al abogado Héctor Scotti, ex Juez de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires y ex Juez de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo que "haciendo las veces de 'padrino´ del Estudio de Marcelo Esteban Urban, movía sus influencias y se encargaba de hacer lobby en los tribunales laborales, especialmente en la Sala N° VII de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, ubicada en Lavalle N° 1554 piso 5° en Capital Federal, para proteger al sindicalista portuario".
A pesar de esos antecedentes y con el amparo del macrismo, Urban siguió operando y por estos días se quedó con el control de la OSPIA, a cambio de los servicios prestados a Correa, el dirigente de la FEIA resistido por los 12 secretarios sindicales de los ingenios que operan en Tucumán.