"Tonino" Reinoso afirmó que "en mayo llegó Correa a tomar posesión de la Ospia de la mano de una sentencia vergonzosa de la Sala VIII de la Cámara Nacional del Trabajo que le entregó la Federacion de Empleados de la Industria Azucarera (FEIA), aun sabiendo que no tiene gremio que le permita ocupar algún cargo dirigencial".
En tal sentido, Reinoso demostró ante la Justicia Federal que Correa nunca fue empleado del ingenio Marapa, pero eso no fue considerado por la Cámara Nacional del Trabajo.
Ahora, Reinoso aseguró que "el actual titular de la obra social comenzó con el vaciamiento y la entrega del patrimonio de los trabajadores". Para sostener esto, indicó que "Correa en menos de 40 días de gestión nombró a toda su parentela y amigos que ocupan oficinas en toda la obra social con sueldos exhorbitantes".
Agregó que "junto a él llegaron desde Buenos Aires su nueva Tesorera, María Belén Bau que no tiene ninguna relación con la actividad azucarera y que por casualidad es abogada del estudio de Marcelo Urban, su abogado e interventor en la gestion macrista de varios sindicatos y obras sociales, quien asumió el manejo técnico de la Ospia".
El dirigente obrero del ingenio Aguilares, explicó que "Urban, hoy apoderado legal de la obra social junto a los abogados locales Alejandro Urueña y Pablo Romano Posse, ocupa una cómoda oficina en la Ospia donde recibe prestadores y decide sobre el futuro de la institucion".
Reinoso manifestó que desde la llegada de Correa, el 29 de abril pasado, "disminuyeron las prestaciones, no se atiende a los afiliados, no se pagó a los médicos auditores y no permite el ingreso de los dirigentes de la FEIA que no son de su agrado".
Sin embargo, precisó que "en este corto tiempo utilizó más de 30 millones de pesos para pagos inconsistentes. Como por ejemplo, en un mismo día destinaron $2 millones para una empresa de informática; hicieron compras de materiales de construcción cuando no hay ninguna obra en marcha en la institución y lo que es más grave aún, hay una suma millonaria puesta a disposición de un fideicomiso, desviando fondos de la obra social sin ningún destino cierto".
Llamó también la atención de Reinoso que a partir del 15 de mayo pasado y hasta la primera semana de junio, "desde la Tesorería giraron más de $11 millones a prestadores o proveedores nuevos o fantasmas, muchos de los que nunca fueron considerados por la gestión anterior". Incluso, aseguró que "los dos primeros cheques que firmó la tesorera, fueron para Correa y para el estudio del abogado Urban".
También cuestionó que en este tiempo se realizaron transferencias enormes "a cuentas como las del doctor Julio Simon o a empresas de seguridad o fundaciones, por nombrar solo algunas, lo que me hace pensar que Correa y compañía comenzaron con el vaciamiento de la Ospia", dijo Reinoso.
"Esa es la Ospia de Correa y de Urban, sin prestaciones para los afiliados, con el control de millonarias sumas de dinero y el despido de los trabajadores", aseveró "Tonino" Reinoso, que llevará el caso a la Superintendencia de Salud de la Nación para evitar el saqueo de la obra social.