Al aire de Radio Prensa, la ministra de Trabajo de la Nación, Raquel Kelly Olmos, detalló los planes que el gobierno lleva adelante para mejorar la generación de empleo y el ingreso de los trabajadores. Entre las medidas impulsadas, la funcionaria destacó la discusión sobre los proyectos para reducir la jornada laboral que se lleva adelante en el ámbito del Congreso. "La ley que rige las 48 horas semanales es de 1929, tiene casi 100 años. La mayoria de los países a avanzado en esta materia y Argentina debe seguir el mismo camino", sostuvo en conversaciones con el programa Quien quiere oir que oiga.

Según Olmos, desde la década del 60 a la fecha, hubo un incremento del 60% de la productividad general en la Argentina, el cual genera la necesidad de pensar nuevas formas de redistribución del trabajo. "Una manera de redistribuirlo es reducir la jornada laboral y generar un mejor equilibrio entre el trabajo y las tareas de cuidado o de recreación para el conjunto de los trabajadores". "Hay que plantear un horizonte de reducción y un proceso que vaya alcanzándolo con un programa consensuado", agregó.

No obstante al marco normativo general en discusión, la ministra plantea un debate más profundo que debe darse en el seno de cada actividad, siempre respetando el principio de negociación colectiva. "Siempre tiene que haber la flexibilidad de negociación por convenio colectivo. Las normas de caracter general fijan el máximo tolerable de horas laborales, pero de ninguna manera obstaculizan que se negocien en el marco de cada convenio colectivo propuestas diferentes, mejores, por supuesto, y que sean las más adecudadas para cada actividad. Aunque haya una evolución tecnológica cada vez más acelerada, la negociación tripartita es el mecanismo más adecuado para adaptarse", subrayó.

En este sentido, consideró que plantearse la modificación de los convenios colectivos no debe ser excusa para intentar vulnerar la actividad sindical, ni para propiciar la destrucción del sistema solidario de seguridad social. "Los convenios se actualizan constantemente en base a negociaciones tripartitas. Lo importante es tener la mira en la posibilidad de la unidad nacional y el fortalecimiento de una mayoría que logre acordar un programa de desarrollo nacional. Si Sergio Massa es presidente de la Nación, conducirá este proceso con los valores centrales que formula Unión por la Patria, es decir, los derechos laborales son una columna social de la paz social, esto no se negocia”.

"Podemos convenir con otras fuerzas políticas como trabajar nuevos proyectos. Ya lo hemos visto con el debate para eliminar la cuarta categoría del impuesto a las Ganancias, en donde hemos conseguido el apoyo de muchos que no forman parte de nuestra bancada. El mismo camino debemos seguir en el debate de proyectos que puedan agregar mucho valor a los recursos que tiene la Argentina. Vamos a mejorar la distribución del salario en la medida en que agreguemos valor a nuestras producciones", añadió.

"Los derechos laborales son una columna social de la paz social, esto no se negocia”, dijo la ministra Raquel Kelly Olmos.

En cuanto a la oposición, y fundamentalmente sobre la figura de Javier Milei y sus propuestas de extrema derecha, explicó que "hay que entender que cuando te hablan de reducir el gasto público, en realidad de lo que te hablan es de reducir la inversión, que es necesaria para construir una sociedad que genera más valor y que tenga la posibilidad de brindar una mejor calidad de vida para el conjunto".

“Cuando hablan de libertad económica, hablan de especulación financiera porque lo asocian a una apertura indiscriminada comercial y a un corte de negocios con países con los que el país comercia. Piensan en una Argentina achicada y reducida, algo típico del neoliberalismo egoísta, codicioso, del sálvese quien pueda, que deja niveles de empobrecimiento que son muy difíciles de revertir. Destruir es muy fácil, uno puede venir con una motosierra y destruir cualquier cosa, pero la virtud está en construir, no en destruir", disparó.

Y en este marco, cargó contra las propuestas de Juntos por el Cambio que apuntan a la reducción de los aportes patronales. Contrapuso, en este caso, las medidas de puente al empleo impulsadas en 2008 y 2014, que generaron un crecimiento de puestos de trabajo, frente a las intenciones de avanzar en una reducción generalizada de aportes patronales. "Cuando se aplica una reducción con caracter general, como hizo el macrismo, lo único que se obtiene es definanciar la seguridad social y no se logra una mejora laboral. En 48 meses que gobernó Macri, se destruyó el empleo en 44 meses. No estamos de acuerdo con una reducción generalizada. Tenemos trabajos científicos que demuestran que el desfinanciamiento del sistema de seguridad social no mejora la capacidad de creación de puestos de trabajo", remarcó.

También apuntó contra la propuesta de eliminar las indemnizaciones y avanzar en un fondo de cese laboral, como en la actualidad rige en el sector de la construcción. "La famosa mochila laboral solo funciona para los obreros de la construcción, en donde se sabe que cada obra empieza y termina y que el trabajador después será absorvido por otra obra. Universalizar esta situación después resulta mucho más caro. Está bien pensar en mecanismos que contemplen cada situación de discontinuidad, pero no se puede pensar en algo de caracter general", sentenció.