"Sabemos que estas fechas son difíciles", aseguró Federico Masso, ministro de Desarrollo Social de Tucumán, en entrevista con Los Primeros. El funcionario enumeró las medidas que debe tomar su cartera para asistir a los sectores más desfavorecidos por la crisis a nivel nacional, en una provincia en la que el 55,8% de la población es pobre.

Las cifras son preocupantes. Para encontrar semejante nivel de pobreza en Tucumán hay que remontarse 20 años atrás. Sobre este dato, Masso explicó que los índices de indigencia, que subieron más de 6 puntos, se deben a la inflación, pero no afectaron a los puestos de trabajo: "Hubo un incremento en la indigencia y en la pobreza en los últimos meses, pero ese aumento no se da en el desempleo", aseguró.

Además, enumeró las medidas de contención que tuvieron que tomar por las consecuencias de la crisis económica: "Estamos reforzando nuestros dispositivos de contención, que en cantidad solo son superados por la provincia de Buenos Aires. Aseguramos el plato de comida para más de 400.000 chicos gracias a los comedores comunitarios, mientras que 111.000 familias tienen acceso a 8 artículos y ese número se elevará en un 20%", anticipó.

Masso, que el 30 de octubre cumplirá un año al frente del Ministerio de Desarrollo Social, le dio gracias a la iglesia Católica, a la iglesia evangélica y a las organizaciones sociales que "dan una mano importante", según aseguró, y anticipó que se seguirán implementando meriendas comunitarias para contener sobre todo a las infancias.

El ministro afirmó que negocia con el ministro de Economía, Daniel Abad, por el presupuesto que tendrá su cartera el año que viene y dejó algunos datos contundentes sobre las cifras que gestionó en su mandato: "Hasta el momento, invertimos $69.500 millones en programas alimentarios, del cual el 30% fue aportado por el Gobierno Nacional", detalló.

La entrevista con el funcionario se dio mientras el gobernador Osvaldo Jaldo se prepara para reunirse con el presidente Javier Milei esta noche en la Quinta de Olivos. Allí, el jefe de Estado brindará un agasajo a los gobernadores "dialoguistas" que fueron claves para que Diputados respalde el veto a la Ley de Financiamiento Universitario.