“Estamos frente a un genocidio social de todos los sectores con políticas invasivas. Intentamos construir conciencia frente a una batalla cultural que hemos perdido. Muchos sectores populares apoyaron a la derecha”, dijo Salas.
Con respeto a la situación de los talleres de Tafí Viejo.. el dirigente dijo que los ferrocarriles no sólo son un servicio de transporte para la gente sino que fomentan la producción. “Cada estación de tren era vida para los pueblos. Se quieren hacer desaparecer los ramales y dejar mucha gente sin trabajo”.
“Hay que dar pelea y lograr consensos. Esto es un problema que viene de otros gobiernos. El transporte privado es poderoso y atenta contra los ferrocarriles. Los talleres tenían más de 5000 empleados y hoy no llegan a 500 personas, es triste”.