Un informe de la Policía Federal elaborado a pedido de la Justicia confirmó que todos los domicilios registrados por las empresas Betail SA y Edekom SA, asociadas al exsenador Edgardo Kueider y su socio Rodolfo González, son falsos. Investigan la compra de propiedades en la ciudad de Paraná bajo un fideicomiso.
En tanto, en el Gobierno recrudeció la tensión entre el presidente Javier Milei y la vice Victoria Villarruel, a raíz de la sesión especial en el Senado donde se destituyó al legislador entrerriano.
La investigación, que abarca varias provincias, también reveló que González, más conocido como "Gonzalito", permanece sin ser ubicado pese a los esfuerzos policiales. Las líneas de trabajo de los investigadores se centran en las empresas Betail SA y Edekom SA, propiedad de Kueider y González, que registraron domicilios en lugares donde nunca operaron.
En un caso, Betail SA figuraba en una casa de Liniers que lleva años en venta. Los vecinos confirmaron que allí vivía una familia mayor y nunca hubo actividad empresarial.
Edekom SA, registrada en una oficina de Cerrito 1320 en la Ciudad de Buenos Aires, tampoco mostró vínculos con Kueider. Actualmente, funciona allí un estudio contable ajeno a las investigaciones.
Además, un departamento declarado como domicilio fiscal de Edekom albergaba a un empleado de otra empresa, quien negó conocer a Kueider o su firma.
El socio de Edgardo Kueider que no aparece
Rodolfo González, socio de Kueider, tampoco pudo ser localizado en los domicilios registrados a su nombre en la Ciudad de Buenos Aires, Buenos Aires y Entre Ríos. En uno de ellos, su hijo admitió residir, pero solo aportó un número telefónico que no resultó ser útil.
La búsqueda también incluyó una estancia sobre la ruta 14, donde solo se encontró un cartel que decía: "El Maná de mi Angelito".
En Morón, vecinos reconocieron haberlo visto en un edificio, pero no se lo halló pese a un allanamiento posterior.
Las empresas de Kueider están bajo la lupa en dos causas judiciales. Una, liderada por el fiscal José Arias en Concordia, investiga presunto enriquecimiento ilícito durante su período en el Congreso.
La otra, dirigida por la jueza federal Sandra Arroyo Salgado, analiza maniobras para ocultar bienes mediante fideicomisos. Ambas investigaciones han revelado conexiones entre Kueider y González, quien le cedió una camioneta valuada en 40.000 dólares para uso personal.
Este vehículo fue usado por el exsenador para cruzar a Paraguay y también forma parte del análisis judicial.
Allanamientos y un conflicto de competencias
La semana pasada, se llevaron a cabo allanamientos simultáneos en varias direcciones, incluidas oficinas en Combate de los Pozos, a dos cuadras del Congreso. En uno de ellos, se secuestró el teléfono de una abogada asociada a González.
La situación podría derivar en un conflicto de competencias entre las investigaciones de Arias y Arroyo Salgado, que podría ser resuelto por la Corte Suprema.
Mientras tanto, los fiscales siguen recolectando pruebas sobre la red de domicilios falsos, bienes ocultos y actividades sospechosas relacionadas con las empresas y sus propietarios./ambito.com