En Tucumán, los usuarios de electricidad enfrentan la posibilidad de sufrir aumentos tarifarios debido a la recategorización de subsidios realizada por la Secretaría de Energía de la Nación. Esta medida afecta a alrededor de 70.000 hogares en la provincia, quienes perderían el beneficio de subsidios en sus facturas de luz a partir de enero y febrero de 2025.


El interventor del Ente Regulador de los Servicios Públicos de Tucumán (Ersept), José Ricardo Ascárate, confirmó que la Nación cruzó los datos de los usuarios y, como resultado, muchos de ellos dejarán de recibir el subsidio por el servicio de electricidad de la distribuidora EDET. La recategorización se basa en un análisis de los datos laborales, económicos y tributarios de cada hogar, lo que determinó que muchos usuarios pasen a una categoría superior, perdiendo así el acceso a la tarifa subsidiada.

Ascárate explicó que, aunque aún no se tienen cifras definitivas, se estima que decenas de miles de usuarios serán excluidos del beneficio.

"Estamos cruzando datos entre octubre y enero, y estamos hablando de un número importante de hogares que ya no recibirán subsidios. Esta no es una decisión de la Provincia, sino del Gobierno Nacional", aclaró el interventor.

El tema surgió luego de una acción de amparo presentada por el diputado Carlos Cisneros y la abogada Patricia Neme, representante de la Asociación Civil Red de Defensa de Usuarios y Consumidores (Redecu). La demanda buscaba cuestionar la segmentación de tarifas de electricidad, y el juez Pedro Yane Mana ordenó al Ersept dar tratamiento urgente a los reclamos.

En este contexto, el cruce de información realizado por la AFIP a finales de 2024 revisó los datos de los beneficiarios de subsidios, y muchos usuarios fueron desafectados del Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE), lo que ha generado preocupación en la provincia.

Ante el impacto de la medida nacional, el Gobierno de Tucumán firmó un convenio con EDET en agosto de 2024 para aplicar una tarifa social plus que otorgaría descuentos fijos en las facturas de electricidad de entre $5.000 y $7.000 a los hogares de la categoría N2, considerada de ingresos medios. Este beneficio provincial podría alcanzar a unos 300.000 hogares, pero no podrá compensar la eliminación de los subsidios nacionales en muchas familias.

En Tucumán, cerca del 70% de los usuarios de electricidad se encuentran en la categoría N2, lo que hace que la recategorización nacional afecte a una gran parte de la población. La situación está siendo monitoreada de cerca por las autoridades provinciales, quienes observan con atención el antecedente de Salta, donde se promovió una acción de amparo similar para mantener abierto el RASE de manera permanente.

Con la decisión nacional en marcha, se espera que la medida cause un aumento en las tarifas de electricidad para miles de tucumanos. Además, el Ersept anticipa que los reclamos por este ajuste podrían generar nuevas complicaciones, ya que muchas personas afectadas por la recategorización probablemente busquen impugnar la medida.