El secretario General del sindicato de Empleados del ingenio Aguilares, Rodolfo "Tonino" Reinoso, que mantiene una larga disputa con el actual titular de la Federación de Empleados de la Industria Azucarera (FEIA), Juan Correa, a quien no le reconoce el derecho de conducir la organización sindical y mucho menos la adminstración de la Obra Social del Personal de la Industria Azucarera (Ospia), aseguró que "solo con el respaldo político de la Casa de Gobierno, la obra social terminó en manos de Correa".

Reinoso señaló que el apoyo político es evidente de parte de la ministra de Gobierno y Justicia, Carolina Vargas Aignasse, ya que "en los últimos tres años se negó a recibirnos para tomar las denuncias que hicimos contra Correa, que usurpando el cargo de titular de la FEIA se quedó con el manejo de los planes intercosechas y los repartió entre sus familiares y amigos. Es gente que no tienen ninguna relación con la actividad azucarera".

En ese sentido, precisó que en los años 2019 y 2020 pusieron en conocimiento de la ministra que "Correa había incluído como obreros de la industria azucarera a su esposa, Cristina del Valle Melián, docente jubilada; a su hermano, Samuel Correa, que era empleado por la Municipalidad de Banda del Río Salí; y hasta su empleada doméstica, Sara Rosa Paz, entre otros familiares y amigos". Sostuvo que todos ellos obtuvieron entre $3.500 y $8.000 de acuerdo al listado que aprobó la ministra Vargas Aignasse.

Pero para Reinoso hoy el tema adquiere mayor trascendencia cuando desde el 29 de abril pasado, la Sala VIII de la Cámara Nacional del Trabajo le entregó a Correa la FEIA, aún sabiendo que no tiene gremio porque quedó demostrado ante la Justicia Federal que nunca trabajó en el ingenio Marapa, y por ende el manejo de la obra social.

En ese punto, el dirigente del ingenio Aguilares afirmó que "en menos de 40 días ya dilapidó más de 30 millones de pesos en pagos injustificados a proveedores inexistentes y con facturas truchas seguramente para saldar favores o para vaciar a la Ospia".

Reinoso aseguró que "Correa comenzó a despedir personal de la obra social y en su amplia oficina cita a prestadores y proveedores para conocerlos y a una de las farmacias prestadoras, abiertamente le comunicó que a partir de ahora el 15% de lo que facturan debe quedarse en la caja de la Ospia para el Gobierno Provincial".

"Espero que el gobernador Juan Manzur no haya sido parte de este arreglo de su ministra de Gobierno y Correa, porque estaríamos frente a un grave hecho institucional", afirmó Reinoso.

Por último, Reinoso manifestó que "este es el dirigente sindical que el gobierno quiere, el que despide empleados sin causa, que cobra sobresueldos y que tiene de socio y abogado, al amigo personal del expresidente Mauricio Macri, al abogado Marcelo Urban, que viaja una vez por semana a Tucumán a buscar el cheque y que terminar provocando la quiebra de la obra social".